martes, 9 de marzo de 2010

NUESTROS HIJOS

Después de casarnos decidimos, como tantas otras parejas tener hijos. Pensamos que era lo más fácil y natural del mundo. (También pensamos que era normal casarnos sin piso).. Pero parece ser que todo en nuestras vidas iba a ser complicado y difícil.. Los hijos no llegaban. Empezamos con médicos, pruebas, viajes a hospitales...y no pudo ser. Otra prueba ( en esos momentos la más dura) en nuestras vidas. Pero Jose y yo no nos vinimos abajo, creo que nunca lo hemos hecho, y decidimos empezar los trámites para adoptar un niño-a. Una etapa de nuestra vida que jamás olvidaremos y que continuó uniéndonos y fortaleciendo nuestro amor. Tramitamos la adopción en Colombia y en España al mismo tiempo. Al cabo de un año y pocos meses de papeleos y llamadas telefónicas recibimos la noticia de que había un niño de cuatro meses y medio esperándonos en Colombia. Allá que nos fuimos y el día de nuestro aniversario de boda (ocho años después) tuvimos por primera vez a Josep en nuestros brazos. Fue el mejor regalo de aniversario que tuvimos, desde entonces el cambio en nuestras vidas fue algo maravilloso que nos hizo seguir dando gracias a Dios por todo lo que teníamos. Pasaron los años y en febrero de 2.000 nos avisaron de Valencia para hacernos un estudio de idoneidad para la adopción en España, Josep tenía entonces 8 años. Allá que fuimos los tres y después de cuestionarios, tests, preguntas y demás nos vinimos a casa pensando que eso de la idoneidad eran tonterías y que no teníamos nada que hacer. Nuestra sorpresa fue que en Abril recibimos la dichosa idoneidad, eso quería decir que estábamos en lista de espera como tantos otros.
No hicimos mucho caso, dada la larga lista de matrimonios que quieren adoptar, creímos que era prácticamente imposible. Nuestra sorpresa fue que en Junio recibimos una carta en la que se nos comunicaba que había una niña de cuatro meses y medio a la que tenían en acogida un fantástico matrimonio de Gandía. Concertamos una visita con una trabajadora social. Nos advirtieron que faltaban unos papeles y que teníamos un 95% de posibilidades de poder adoptarla, pero que el otro 5% era posible que la madre biológica la reclamara... ¿Qué hacer, aceptar o dejarlo pasar? Jose y yo no dudamos ni un segundo, iba a ser nuestra hija y íbamos a luchar por ella.
Comenzó todo un periodo de tiempo en el que la incertidumbre se apoderaba de nosotros, Maria (que así le pusimos) estaba con nosotros, pero sin sus apellidos, sin sus papeles, siempre pensando que pasaría...Fue una época también difícil Josep y Maria ajenos a todo y felices, nosotros esperando la solución y como siempre siguiendo adelante. Al cabo de dos largos años todo se solucionó y Maria se quedó para siempre. MARI.

1 comentario:

  1. hola guapa, m'encanta el que estas fent en el blog, seguix aixi. Besets Xelo

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