"La vida es tan intensa, tan inmensa, tan hermosa y tan grande como el mar. Cuando llegamos a este mundo, el viento sopla fuerte en el barco de nuestra vida. A medida que vamos creciendo, aprendemos a navegar con el mar en calma, picado e incluso en tempestad. Pero un buen día, sin saber muy bien por qué, el viento deja de soplar. Entonces, tenemos dos opciones: llorar, lo cual no conduce a nada, o aprender a remar. tras mucho remar, ya exhaustos de tanto ver agua y agua y agua, un día Dios nos ilumina con el faro de su inmensa luz y nos guía hasta que llegamos a buen puerto". "La vida es el mayor arte que existe y saber vivir es ser un gran artista. Vivir las veinticuatro horas de un día intentando superar los momentos difíciles, sabiendo disfrutar de los momentos agradables que nos presente la vida, eso es vivir y vivir siempre merece la pena, hasta el final, hasta que el Maestro de nuestra acuarela decide que nuestro cuadro está terminado a su gusto y sólo le queda poner la fecha y la firma."
Jose ya llegó a buen puerto, aprendió a remar, a remar incluso contracorriente, a remar sin desfallecer pero llegó el momento y Dios se lo llevó, pero seguro que con su Luz le sigue iluminando y ahora más cerca que nunca... Si la vida es el mayor arte que existe, seguro que Jose fue el primer artista. Supo vivir a tope todos los momentos de su vida, todo le merecía la pena, vivió plenamente hasta que el Maestro creyó que terminó su obra y puso su fecha y día...........
MARI.
No hay comentarios:
Publicar un comentario