JOSE, QUERIDO POR TODOS

Siempre hemos notado que la gente nos quería.

El haber estado trabajando en nuestra Parroquia, hizo que la relación con la gente (amigos y conocidos) fuera bastante grande.

Todos sabemos lo que hacemos y porque lo hacemos, pero nunca esperas que nada se te reconozca...lo haces porque lo sientes así y pensamos que somos útiles de alguna forma en las actividades que realizamos.

Es gratificante trabajar por los demás, eso es suficiente y te llena la vida.

Sabes que hay gente que no piensa como tú y gente que sí comparte tus ideas..pero siempre hemos logrado respetar y ser respetados.

Jose sabía que era querido por muchos, pero ¡Dios! el alcance de tanto cariño no lo podía imaginar jamás. Durante el año de su enfermedad ha sido un día a día de recibir, recibir y recibir....

Es increíble recordar ahora todo lo que hemos pasado. Jose estará orgulloso de este año tan lleno de gestos, signos, detalles, acciones, miradas,....tantas cosas por parte de tanta gente que el solo hecho de pensarlo te pone los pelos de punta.

No podría poner nombres, seguro se me olvidaría alguien, pero si quiero recordar y compartir algunas de las cosas que recibimos materiales o no de todos vosotros, cosas que marcan...que dejan huella...que llenan el corazón de gratitud y de alegría...

......vuestras visitas y llamadas, vuestras miradas, vuestras sonrisas y vuestras lágrimas, vuestros besos y abrazos...el que traía con cariño una tontería y Jose se emocionaba, una flor, una crema, una manta, un rosario, unas trufas, unos calcetines, unos bombones......El regalo de unos amigos, casi llegando a su final.....y sobre todo la disponibilidad de TODOS por tantas y tantas cosas...Llamar a la hora que fuera y en unos minutos presentarse en casa, necesitar cualquier cosa y al momento solucionado...Era como decir "pedid y se os dará"....hemos sido colmados de la gracia de Dios por medio de todos los que nos quieren. Hemos podido experimentar la bondad de Dios por medio de ellos...Por eso Jose decía que Dios no tenía la culpa de nada...era El, el que nos ayudaba a ponernos el camino fácil, lleno de personas con nombre y apellido que nos hacian la vida enormemente maravillosa y sin obstáculos de ninguna clase. Todo fue un regalo para nosotros.

Cada día era recibir cosas buenas, por eso Jose seguía con su actitud de comerse el mundo...el respaldo de tantas personas y todo su cariño fueron un pilar fundamental en su enfermedad y su vida fue, como le dijo un amigo, "recoger todo lo que había sembrado".

¡GRACIAS A TODOS POR TODO!

MARI CARMEN.