MAS REGALOS...VIAJE A ITALIA

Sigo recordando todo lo que Jose dejó tras de sí ...Fueron tantas las cosas vividas en "ese año" tan tremendamente intenso...

Bueno, todo eso ya lo sabéis y también que nada le impidió hacer cosas...y comerse el mundo...¡Y PUDO CON TODO LO QUE SE PROPUSO!

Ya en silla de ruedas y con toda la ilusión del mundo, en Agosto de

2.009 hicimos un viaje a Italia.

Su ilusión era sobre todo que nuestro hijo, con 17 años, nos acompañara.La niña por supuesto venía, pero a Josep, creíamos que le costaría eso de hacer un viaje "con sus padres"...Imagino que viendo la situación y la ilusión aceptó acompañarnos y seguro que no era lo que realmente le apetecía....Junto a una amiga, mis sobrinos, la hermana de Jose, el marido y su pequeñajo pasamos una semana inolvidable en la bella Roma y Florencia.

Fue otro regalo para Jose. Ni el calor ni el cansancio, ni los lugares no adaptados, fueron motivo de queja por su parte....Todo tenía solución, además los acompañantes que teníamos nos hicieron las cosas fáciles...Nos quejamos los demás, pero él como siempre demostró, continuó con su fuerza y sobre todo con su tolerancia ante todo.

Disfrutó del viaje, lo saboreó y como siempre, nos sorprendió con su generosidad, porque nos dio ejemplo de superación en todo momento.

Fue una semana agotadora, pero llena de bellos momentos compartidos con gente que nos quería y que querían "hacerle feliz"...

¡LO CONSIGUIERON AL 100%

NOS REGALARON MOMENTOS INOLVIDABLES!!!!!!!

Antes de irnos, aprendimos algunas frases en italiano....Jose lo primero que aprendió fue pedir "un carajillo"....buscamos frases para entendernos, con muchas tonterías que hicieron pasar ratos de risas durante los preparativos y durante todo el viaje...

En nuestra estancia allí, unos amigos de su hermana que viven en Roma, hicieron todo lo posible por conseguir que estuviéramos lo más cómodos posible, y conseguir toda la adaptación que estuvo en sus manos...y lo que no pudieron, entre todos lo llevaban con su silla..donde fuera...

Se sintió como un rey...y jamás nos hizo ni una mala cara, ni un mal gesto...Los pies se le hincharon por el calor y no caminar...y encima, yo le puse protector solar en la cabeza (por la calva) y se me olvidó ponerle en los pies...No os podéis imaginar como los tenía el segundo día HINCHADOS Y QUEMADOS. A base de pomadas y masajes por las noches se fue recuperando...La broma de la calva y los pies duró toda la semana...

Los adoquines de las calles de Roma fueron un suplicio para "su trasero", la silla parecía tener muelles...

Para subir y bajar de los autobuses ADAPTADOS...fue otra odisea, porque todos llevaban el letrero correspondiente de "ADAPTADOS"...pero ¿casualidad? a ninguno le funcionaba la rampa..así que a pulso, lo subíamos y lo bajábamos...

Todo con buen humor y con ganas de no dejarse nada por ver...

Lo mejor (dada la situación) fue que en todos los lugares había colas interminables y la atención hacia nosotros fue espectacular, entradas gratuitas y sin colas...

Lo peor, fueron los restaurantes, la mayoría sin accesibilidad y sin servicios adaptados...un "gran problema" que tuvimos que ir sorteando día a día...

Pero la experiencia vivida fue inolvidable, y si todos lo pasamos bien, Jose lo vivió con toda el alma, creyendo que sería de sus últimos viajes...pero le esperaba otro muy muy especial, que ya os contaré....

Mari Carmen.