TROZO DE UNA CARTA DE UNA FAMILIA DE ACOGIDA DE NIÑOS SAHARAUIS...
"Podríamos hablarles del conflicto del Sahara, de los intentos por conseguir la paz o de la posición de España en el conflicto, pero no lo vamos a hacer, y no lo vamos a hacer porque para eso están los telediarios. También podríamos hablarles de los famosos que apoyan la causa saharaui, y no lo vamos a hacer, porque para eso está la prensa.
Lo que si voy a hacer es hablarles de los niños saharauis que vienen cada año, y de nosotros, las familias de acogida, familias anónimas que año tras año acogen a estos niños para darles, no un hogar porque lo tienen, sino cariño cuando están lejos de sus casas, una buena alimentación, unas revisiones médicas adecuadas y, al fin y al cabo, unas vacaciones de verano saludables, lejos de las temperaturas de más de 50º C.
Cuando decidimos acoger a un niño saharaui, sabíamos lo que queríamos, pero no donde nos metíamos, ni el torbellino de emociones y sentimientos que eso implicaria. La primera vez que les ves se te encoge el corazón...y cuando se van las contradicciones se agolpan...Has de tener claro, muy claro que solo están aquí en acogida...de vacaciones...."
Este pedazo de carta ha llegado a mis manos por internet, es más larga pero con lo expuesto creo que basta.
Nunca he tenido a un niño saharaui en acogida, pero sí conozco gente cercana que los tienen...y la felicidad que trasmiten supera los problemas que se encuentran: normas, idioma, costumbres...
Es un gesto que siempre he admirado. La solidaridad de las personas que acogen a estos niños va más allá de ser una obra de caridad...Es un intercambio cultural, que da a unos y a otros la oportunidad de contactar con una cultura distinta, con personas diferentes, con otras costumbres y sobre todo les lleva a un aspecto importante como es la sanidad, una vez al año están controlados y vigilados y esto les da más oportunidades para tener un crecimiento normal.
Hay mucha gente que piensa que esto no es bueno para los niños, que es como enseñarles "el caramelo" para luego quitárselo..., les parece duro y cruel...
Mi opinión, sólo es mi opinión, después de ver a niños felices año tras año es otra...Ellos tienen allá a sus familias, no son niños abandonados, y desean volver a ver sus papás, a sus hermanos...y se van ansiosos y deseosos de reunirse con los suyos para contarles sus experiencias vividas...Se entristecen en las despedidas, por supuesto que sucede, porque son niños "normales" con una ternura y unos sentimientos hacia las personas que les han cuidado y querido...Pero quien no se entristece en una despedida?...
Ellos saben que son unas vacaciones, y son lo suficientemente inteligentes para diferenciar "sus vacaciones" y "su realidad",,.
¿Quien no se ha ido de vacaciones..a todo tren?...Y luego tiene que volver a "su realidad" que no es tan cómoda ni tan bonita...
Y no pasa nada, porque su vida sea cual sea le espera...pero que nadie les quite "lo disfrutado"...
Un abrazo a todas las familias que optaron este año por acoger a un niño.
¡ENHORABUENA POR VUESTRA DECISIÓN!
Mari Carmen.
Un abrazo grande.
ResponderEliminarQue tengas una bella semana.
Besos
Me parece estupendo que hayan familias de acogida, es una alegría para los niños y las familias pasar unos días juntos y ver esas caritas tan felices.
ResponderEliminarBesos.