martes, 8 de febrero de 2011

VUELVE EL PASADO...


              "Martes con mi viejo profesor" (Mitch Albom)


     "Cerró los ojos, y tosió.
     Y volvió a toser.
     Y volvió a toser más fuerte.
     De pronto, estaba casi ahogándose, parecía que la congestión de sus pulmones se burlaba de él, saltando hasta media altura, volviendo a caer después, robándole el aliento.
     Se ahogaba,  después tosía violentamente y sacudía las manos ante sí, con los ojos cerrados.



     Tiré de él instintivamente hacia adelante y le di palmadas en la espalda, y él se llevó un pañuelo de papel a la boca y escupió un esputo de flema.


     La tos cesó, y Morrie volvió a recostarse entre las almohadas de gomaespuma y absorbió aire.


     -¿Estás bien? ¿Está todo bien?-pregunté yo, intentando ocultar mi miedo.
     -Estoy...bien-susurró Morrie, levantando un dedo tembloroso-.Espera...un momento, nada más.


     Nos quedamos en silencio hasta que volvió a respirar normalmente. Yo sentía el sudor en mi cuero cabelludo. Me pidió que cerrase la ventana, pues la brisa le daba frío.



     Por último, con un susurro, dijo:
    -Ya sé cómo quiero morir.
    Yo esperé en silencio.
    -Quiero morir serenamente. En paz. No como lo que acaba de pasar.


    Y aquí es donde entra en juego el desapego. Si me muero en pleno ataque de tos, como el que acabo de tener, tengo que ser capaz de desligarme del horror, tengo que decir: "Este es mi momento".



     No quiero  dejar el mundo en un estado de miedo. Quiero saber lo que está pasando, aceptarlo, ir a un lugar en paz y soltarme. ¿Me entiendes?......"


    Mari Carmen.


    


    

5 comentarios:

  1. El miedo, las sombras se cuelan como el humo y nos ahogan. No sé el nombre del autor pero te dejo este poema, para mi fue de gran ayuda en su momento...

    Si me voy antes que tú, no llores por mi ausencia; alégrate
    por todo lo que hemos amado juntos.
    No me busques entre los muertos, en donde nunca estuvimos;
    encuéntrame en todas aquellas cosas que no habían existido
    si tú y yo no nos hubiésemos conocido.
    Yo estaré a tu lado, sin duda alguna, en todo lo que hayamos
    creado juntos: compartido tanto en el trabajo como en el
    placer, y en las lágrimas que intercambiamos.
    Y en todos aquellos que pasaron a nuestro lado y que,
    irremediablemente, recibieron algo de nosotros, y llevan
    incorporado -sin ellos ni nosotros notarlo- algo de ti y algo
    de mí.
    También nuestros fracasos, nuestra indolencia y nuestros
    pecados serán testigos permanentes de que estuvimos vivos y
    no fuimos ángeles, sino humanos.
    No te ates a los recuerdos ni a los objetos, porque
    dondequiera que mires que hayamos estado, con quienquiera
    que hables que nos conociese, allá habrá algo mío. Aquello
    sería distinto, pero indudablemente distinto, si no hubiésemos
    aceptado vivir juntos nuestro amor, el mundo estará ya
    siempre salpicado de nosotros.
    No llores mi ausencia, porque sólo te faltará mi palabra
    nueva y mi calor de ese momento. Llora, si quieres, porque el
    cuerpo se llena de lágrimas ante todo aquello que es más
    grande que él, que no es capaz de comprender, pero que
    entiende como algo grandioso, porque cuando la lengua no
    es capaz de expresar una emoción, ya sólo pueden hablar los
    ojos.
    Y vive. Vive creando cada día, y más que antes .Porque yo no
    sé cómo, pero estoy seguro de que, desde mi otra presencia,
    yo también estaré creando junto a ti, y será precisamente en
    ese acto de traer algo que no estaba, donde nos habremos
    encontrado. Sin entenderlo muy bien, pero así, como los
    granos de trigo que no entienden que su compañero muerto
    en el campo ha dado vida a muchos nuevos compañeros.
    Así, con esa esperanza, deberás continuar dejando tu huella,
    para que, cuando tu muerte nos vuelva a dar la misma voz,
    cuando nuestro próximo abrazo nos incorpore ya sin ruptura
    a la Única creación, muchos puedan decir de nosotros: si no
    nos hubiesen amado, el mundo estaría más triste.
    para ti mi dulce sueño...

    Mi querida Mari Carmen,un abrazo cálido.

    ResponderEliminar
  2. Cada experiencia es única.
    Cada vida es única.
    No vas a cerrar un capítulo y comenzar otro en una hoja nueva limpita, sin manchas de llanto, sin arrugas de experiencias, la vida es una continuidad de sucesos encadenados.
    Mari Carmen, vas a poder porque esto es la vida, porque lo tenés que hacer por primero por vos, luego por tus hijos y porque si no lo hacés uno de estos días bajan de su nube José y Carlos a darte un tirón de orejas :) a ver si te robo una sonrisa.
    Un abrazo grandote
    Besos

    ResponderEliminar
  3. Alondra, GRACIAS...Lo copié, así iré repasándolo poco a poco, hay mucho que sacar del escrito. Lo guardo en mi libreta, con "mis cosas".Me llegó al corazón...UN BESAZO!!!!

    Cantares, siempre atenta, eres especialmente generosa...¡Y conseguiste mi sonrisa!Me imaginé a Jose y a Carlos riendo sin parar para ver como bajaban de la nube para darme ese tirón de orejas...GRACIAS y un BESO ENOOORRRRME.

    ResponderEliminar
  4. Yo también me quiero ir de este mundo sin miedo.

    Llevo muy mal cuando la gente enferma y tose, es un recuerdo que me produce malestar, hace unos años lo escuchaba diariamente y a todas horas, me consumía, lo tengo grabado en mi memoria.

    Un beso para tus hijos y para ti.

    ResponderEliminar
  5. Erika, siento haberte hecho recordar con este texto sabiendo que te produce malestar, te entiendo, estas cosas no se borran...UN BESAZO!!!

    ResponderEliminar